domingo, 23 de junio de 2013

UN CORTIJO EN NORUEGA

Hola de nuevo.Se nota que se me ha acabado la baja, hace siglos que no porto por aquí, jeje.
Afortunadamente han llegado las ansiadas vacaciones, de los alumnos, porque nosotros aún tenemos que rellenar dos o trescientos informes más antes de acabar el mes. Pero no voy a empezar a indignarme ya con los burócratas y demás calaña, no, hablemos de cosas más agradables.
Hace casi un mes ya que tuve un reencuentro de lo más gratificante. ¡Cómo mola encontrarse con gente con la que te llevabas bien y les habías perdido la pista y comprobar que han evolucionado como tú! Porque luego está la otra versión, la del reencuentro con gente con la te llevabas bien pero que en todos estos años han tirado por otros derroteros y ya no tienen nada que ver contigo. Eso sí que chirría, porque te dices a ti mismo:  pero ¿cómo podía yo andar con ese tipo o con esa petarda? Pero vamos, son cosas que pasan.
Volviendo al caso A (el de la gente que mola) y por obra y gracia del p... facebook me he reencontrado con gente con la que hice la carrera y a la que más o menos tenía localizada, pero que no veía desde hacía muuuuuuucho. Organizamos una cena y compartimos una deliciosa velada en la maravillosa ciudad de Murcia en la que se sigue comiendo de muerte y donde la gente sabe muy bien cómo disfrutar de la vida.
Ni que decir tiene que hablamos como cotorras hasta que nos pusimos al día y nos quedamos nuevos después de la terapia de grupo.
Pero como ya he dicho lo mejor es enterarte de lo que han estado haciendo en todos estos años y ver cómo ahora que somos más sabios y más perros (conste que no he dicho viejos, porque seguimos estando estupendos) nos siguen emocionando y atrayendo las mismas cosas.
El único varón de la reunión, Miguel, se ha casado recientemente con un apuesto noruego al que conoció en Malaga. Por supuesto una historia así añade un elemento de lo más exótico. Ya no se trata de contar el típico mantra:  me casé, tuve dos hijos, ahora están en la ESO y estoy hasta las narices de los deberes.
No señor,  esto sí es digno de contarse. No diría yo que dé para una novela, pero de momento ya me está dando a mí para una entrada aquí ;)
Miguel siempre me ha parecido un ser humano maravilloso, es el hermano que todas querríamos tener, el compañero de fiesta perfecto o el confidente leal en quien siempre puedes confiar. Pero sobre todo es inocente y auténtico y en todos estos años no ha perdido esa inocencia. El talento de Ana y Mª José está más que reconocido, no voy yo a descubrir nada nuevo aquí, y por supuesto cada una a su manera siguen siendo increíblemente genuinas y fantásticas. And last but not least, como dicen los ingleses, el coraje y la valentía que tiene mi amiga Eva, además de su contagiosa alegría de vivir son rasgos que con los años la han convertido en una tía muy grande. En definitiva, todos ellos forman un grupo de lo más variopinto pero al mismo tiempo de lo más interesante y al que me siento muy honrada de volver a pertenecer.
Gracias por acordaros de mí. Os quiero chicos.

Suzy

3 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. ¿Qué se puede decir? Efectivamente da gusto recuperar las relaciones que el tiempo dejó atrás. Reencontrarse contigo es un placer y las cosas que dices aún más.

    ResponderEliminar