lunes, 14 de septiembre de 2009

CONCIERTO BRUCE SPRINSTEEN 30 JULIO BENIDORM



Siete horas de pie!! No recuerdo haber hecho nunca nada parecido. El concierto empezaba a las 22.00 y las puertas se abrían en teoría a las 19.00. Como nuestra entrada es de pista, hay que hacer cola por lo menos una hora y cuando abran salir corriendo. Esta vez los Vips (los de la pulsera) se habían chupado una macro cola desde la mañana para conseguir las únicas 1000 pulseras disponibles.
A las 6 y pico y con un sol de justicia nos ponemos en la cola que ya era considerable, pero estamos bien situados. El camión cisterna del agua se ofrece amablemente a regarnos, cosa que se agradece bastante,jaja. La gente se impacienta pero aguanta... Me encuentro con Rubén de Malagüero (otro de nuestros grupos locales), que se sorprende bastante de que lo reconozca en mitad del mogollón. Me identifico como amiga de Patxi (flauta y saxo del mismo) y se queda flipado de lo pequeño que es el mundo (y yo también). La masa empieza a moverse, nos obligan a tirar el agua (hasta ahí normal) y los bocatas (¡eso es mucho morro!) y una vez pasamos las vallas nos lanzamos a la carrera y ¡BINGO! estamos justo en la barrera que separa a los vips del resto.
La primera vez que lo ví, en Valencia en el 2007, cogí sitio en la zona de las pulseras (pura potra), pero comprobé que o estás de las primeras filas o sólo ves cabezas. Así que esta vez aunque pudimos pasar la barrera preferimos quedarnos justo ahí, en el pasillo de los seguratas y los socorristas. No nos tapa nadie. Ahora sólo es cuestión de esperar unas 3 horas hasta que empiece y otras 3 que esperamos que dure,jeje. Ni que decir tiene que la barrera está solicitadísima y cuando quise ir a por bebida y algo de comer (el bocata más caro y más asqueroso de la historia) tuve que jugar al twister (pie izqdo en el verde, mano drcha en la cabeza de alguien) para no pisar a los que se iban sentando en el suelo conforme tomaban posiciones. La odisea para llegar al servicio era más o menos igual, por cierto que me encontré con Alberto, mi compañero del instituto, cuando intentaba atravesar la marea humana, ¡qué fuerte! 30.000 personas y voy y me lo encuentro. Sabía que tenía entrada pero no me imaginaba...
Cuando faltaban unos 10' para las 22.00 aparecen "los chicos de la prensa" cargados con sus super objetivos y trípodes y se nos colocan justo delante. Van y se suben a una especie de escalón donde se sentaban los socorristas. El mosqueo del personal que llevaba ya más tres horas de pie estaba justificado. Se excusan diciéndonos: "tranquis, 3 canciones y nos vamos". Lo justo para distraernos del momento en que aparecieron en el escenario los miembros de la E Street Band (10 en total) y empiezan a tocar ¿¿Los Pajaritos??Se quedan con toda la peña y aparece Bruce descojonado y de negro riguroso con su guitarra al hombro. Nos saluda con un BONA NIT BENIDORM, BONA NIT ALICANTE!! y sin darnos tiempo a contestar empieza a cantar Workin´ on a Highway seguida de Hungry Heart, sin dar tregua y así estuvo hasta la 1 y 15 de la mañana. Sin parar, literalmente. Tres horas y quince minutos de rock and roll en estado puro.
Aunque me lo habían dicho no puedes evitar pensar que lo de tocar 3 horas es porque toca en Madrid o en Barcelona. ¡Qué va! Son tres horas cada vez que se sube a un escenario. Debe perder 3 ó 4 kg por concierto. Nunca he visto nadie sudar tanto...Junto a la bateria le ponen un barreño con una esponja (como la de los boxeadores) y prácticamente después de cada canción la coge totalmente empapada y se la echa por la cabeza. No sé cómo no se electrocuta,jaja.
El derroche de energía y buen rollo es BRUTAL, no para de tocar, cantar, subir y bajar en las tres horas. Está claro que le apasiona lo que hace y eso se contagia. Es todo un showman y un payaso,jeje. Se lo pasa bomba marcándose numeritos con Steve Van Zandt y con el otro guitarra Nils Lofgren (que también da mucha caña). Contrasta bastante con la actitud hierática de Clarence Clemons, sin inmutarse en su taburete,jaja.
No estaban ni el batería de siempre, ni su mujer,Patty, aunque no los echamos de menos para nada. Sí estaban Sister Soozie con su violín eléctrico y quien quiera que fuera el otro batería que estuvo totalmente a la altura. Entre los de las pulseras había una gente con una pancarta muy graciosa que ponía GREETINGS FROM ALBACETE. Yo creía que era la única y cual será mi sorpresa cuando una de las tropecientas veces que se bajó, se puso a cogerla y de repente apareció un mar de cartones y pancartas de todos los tamaños, donde la gente había escrito títulos de canciones, mensajes de todo tipo y hasta caricaturas del Boss. Empezó por una punta del escenario y yo qué sé las que se llevó... Las que más le molaban nos las enseñaba. También le regalaron guitarras de juguete, sombreros de todos los tamaños, gafas de sol, bueno de todo...
Tengo que comentar la cantidad de niños que había. No sé si tendrá algo que ver que Benidorm sea "colonia británica" y esté lleno de guiris, pero el caso es que había familias enteras.
Una de las muchas canciones que cantó con el público Waitin´on a Sunny Day se la cantó a duo con dos hermanas o primas que tendrían unos 8 ó 9 años y la verdad lo hicieron bastante bien.
Cada vez que bajaba a darse un baño de multitudes no dudaba en dar besos, abrazos, tocar a todo el mundo, cantar con el/la que fuera, regalar harmónicas, bueno una pasadaaaaaaa.
La presentación del último disco es sólo una excusa para pegarse una fiesta en directo. Le bastaron 3 canciones para despacharlo. Tiene tanto repertorio que es inabarcable y por si tuviera poco donde elegir, se atrevió incluso con el clásico de los Clash I Fought the Law.
Cuando tocó Born to Run llevaba más de dos horas y el paroxismo se traducía en el número de desmayos que iba en crescendo. Por lo menos sacaron a 5 en camilla. La combinación calor + subidón de adrenalina + apretones es perfecta para las lipotímias,jaja ;)
La apoteosis final llegó con Dancing in the Dark y tengo que confesar que se me saltaron las lágrimas. Son muchos años oyéndola... Por supuesto bajó para que la cantáramos con él pero en vez de coger a la pava de turno y subirla a bailar como en el video, volvió a por las dos crias con las que había cantado Waitin´on a Sunny Day. Las subió al escenario y se marcaron un baile los tres de lo más majo. Pero no se iba, es que es muy bruto el tio.
Después montó otro número; se tiró al suelo y empezó a gritar NO MORE!!, ¡¡NO MÁS!! hasta que apareció un tio con bata de médico y con botella de oxígeno y todo. Cuando lo "reanimó", se levantó, cogió otra guitarra y se arrancó con Twist and Shout. La gente se moría....
El tema lo alargó hasta el infinito y más allá y además lo mezcló con La Bamba con lo que se fue con un final de lo más sesentero, xD.
No le puedes pedir más, no puede haber bises ni nada de OOOOTRA, OOOOTRA.
Imposible, ni el público ni el grupo pueden dar más de sí. Creo que puedo afirmar, y a ver quién es el guapo que me contradice, que no hay NADIE vivo que se deje la piel en el escenario (y nunca mejor dicho) como él. ¡NADIE!
En el concierto de U2 dije que había visto muchos conciertos, pues ¡¡¡NINGUNO COMO ESTE!!!
No he visto nada igual en mi vida. ¡QUÉ DISFRUTE! :)

Suzy

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